Al comparar los dos tipos comunes de granalla que se encuentran en el mercado (granalla de acero con bajo contenido de carbono y granalla de acero cortada), es importante comprender sus características únicas y cómo afectan el rendimiento. Si bien las técnicas de procesamiento especializadas, como la granalla de acero forjado rectificado, pueden mitigar algunas desventajas, este artículo se centra únicamente en las ofertas estándar.
Diferencias de rendimiento:
1. Forma y atributos físicos: La granalla de acero con bajo contenido de carbono tiene una forma esférica, prácticamente libre de imperfecciones físicas y defectos internos. Esta geometría esférica no solo mejora su resistencia al impacto, sino que también garantiza una distribución de fuerza más predecible y uniforme al impactar con la pieza de trabajo. Por el contrario, la granalla de acero cortada se deriva de alambre crudo o cocido y posee una forma cilíndrica irregular con longitudes variables y bordes ásperos. Esta irregularidad conduce a una aplicación de fuerza desigual y un rebote menos predecible.
2. Redondez y dinámica de impacto: La naturaleza esférica de la granalla de acero con bajo contenido de carbono permite un punto de fuerza constante y una distribución uniforme de la tensión, lo que da como resultado características de rebote superiores y un desgaste gradual. Este desgaste gradual promueve una proporción favorable de partículas grandes y pequeñas, lo que mejora la cobertura y, en última instancia, aumenta la eficiencia de la limpieza con granallado. Por el contrario, la forma irregular de la granalla cortada de acero conduce a una aplicación de fuerza inconsistente y un rebote inferior. Su desgaste inicial es mínimo, pero tiende a degradarse rápidamente en polvo, lo que dificulta la formación de una mezcla óptima de partículas y reduce la eficiencia de limpieza. De hecho, se ha demostrado que la granalla de acero con bajo contenido de carbono ofrece una eficiencia de limpieza un 20 % mayor en comparación con la granalla cortada de acero estándar.
3. Desgaste y mantenimiento del equipo: La escasa fluidez de la granalla de acero cortada dentro del equipo de limpieza contribuye a que la tensión en el cabezal de granallado y otros componentes sea desigual, lo que acelera el desgaste. Por el contrario, la forma esférica de la granalla de acero con bajo contenido de carbono minimiza dicho desgaste, lo que prolonga la vida útil de las piezas resistentes al desgaste más de cuatro veces. Esto se traduce en menores costes de mantenimiento y una vida útil general más larga para el equipo de granallado.
4. Acabado de la superficie: La superficie de la pieza de trabajo limpiada que se logra con granalla de acero con bajo contenido de carbono se caracteriza por un acabado liso y brillante, que refleja una alta calidad de la superficie que mejora la apariencia general del producto. Por el contrario, la forma irregular y los bordes de la granalla de acero cortada dan como resultado una aplicación de fuerza variada en diferentes ángulos, lo que genera un acabado de la superficie ligeramente más áspero y opaco. Sin embargo, vale la pena señalar que, en determinadas circunstancias, puede ser necesaria una combinación de granalla de acero y granalla de alambre para lograr resultados de limpieza óptimos.
En resumen, la granalla de acero con bajo contenido de carbono supera a la granalla de acero cortada en términos de consistencia de forma, dinámica de impacto, reducción del desgaste del equipo y calidad del acabado de la superficie, lo que la convierte en la opción preferida para muchas aplicaciones de granallado.